Muerte tras las cámaras
Siempre resulta una experiencia fascinante sumergirse en el nuevo trabajo de un autor que nos gusta.
En este caso lo hice de la mano de Alicia G. García y su nuevo trabajo editado "Muerte tras las cámaras".
La autora de, entre otras, la maravillosa "Buenos días" , nos trae en esta ocasión una historia con tintes de novela negra.
Una cadena de televisión está emitiendo con gran éxito de audiencia, un programa de telerealidad, "La cárcel", en el que se ha invertido un gran presupuesto tanto personal como económico, donde todo se encuentra controlado al milímetro a fin de garantizar la inversión tanto de anunciantes como productores.
Cuando una de las participantes aparece asesinada, la labor de investigación se encontrará no sólo con las trabas habituales en este tipo de casos sino además con las exigentes condiciones de la cadena. ¿Primará la búsqueda de la verdad o los intereses económicos?.
Con este interesante planteamiento arranca una narración ágil donde, más que la búsqueda del asesino, lo que disecciona la autora es la cuestionable ética de una sociedad vendida completamente a la imagen y el dinero, al todo vale porque todo tiene un precio.
Como contrapunto un equipo de investigación con experiencia, decidido a buscar a los responsables a pesar de todas las limitaciones que encuentran a su paso.
Y dando contenido a todo ello unos personajes librando sus propias batallas personales, enfrentando y afrontando las consecuencias de todas y cada una de sus decisiones.
Especialmente intensa una historia que se intercala hacia la mitad de la narración y que bien podría ser en sí misma, un libro completo aparte, en apenas unas pocas páginas que ocupa, por su extraordinario desarrollo y fuerza dramática. Al principio resulta chocante pues es algo ajeno al resto del conjunto, como una pieza de un puzzle distinto, pero a medida que vamos llegando al desenlace, intuimos su importancia y el demoledor impacto que tendrá sobre algunos personajes.
Calificación: Notable.
Un eficaz ejercicio de denuncia sin renunciar a una trama eficaz y bien construida.
Lo mejor: La vertiginosa velocidad con que nos mete en la historia; la creíble naturalidad con que se consolida la historia personal entre el jefe de la investigación y la ayudante de dirección del programa; la espeluznante historia colombiana que protagoniza Mara.
Lo peor: Que funciona infinitamente mejor como drama que como novela negra propiamente dicha.
Comentarios