La cara norte del corazón
Este otoño, los amantes del género negro patrio estamos de enhorabuena pues algunos de los autores más representativos han puesto a la venta sus últimos trabajos y tras acometer su lectura, os los iré reseñando para que tengáis referencias para elegir lectura de cara a las próximas fiestas tanto para vuestro propio consumo como para hacer un gran regalo a alguien especial.
Comenzaré por el que salió primero a la venta: "La cara norte del corazón", de nuestra dama negra de las letras Dolores Redondo..
La autora, que triunfó con su primer libro "El guardián invisible" , (llevado también a la gran pantalla por el navarro Fernando González Molina), dando así lugar a la "trilogía del Baztán" completada con los títulos "Legado en los huesos" y la muy notable "Ofrenda a la tormenta", retoma en este libro a la protagonista de la trilogía, Amaia Salazar pero en un momento temporal anterior al narrado en estos libros. Concretamente durante su formación como agente del FBI. Aquí por fin conocemos el origen de esa relación de la protagonista con ese misterioso interlocutor telefónico con el que sólo habla en horario nocturno.
Una vez más, la llamativa fotografía de la portada, donde el rojo es el protagonista y unas manos infantiles sostienen un muñeco propio del folklore mágico, abren la puerta a una narración que se localiza en Nueva Orleans, con acontecimientos previos a la irrupción del devastador huracán Katrina que arrasó este estado norteamericano en 2005.
La protagonista, Amaia Salazar. se encuentra en la academia del FBI en Quántico realizando un curso de formación junto con otros agentes europeos. Durante una de las conferencias que recibe de la mano del prestigioso agente Dupreé, realizará un ejercicio teórico en el que tienen que plasmar en un informe sus conclusiones sobre los datos del caso real en él expuestos. La llamativa forma de abordarlo levantará el interés de la unidad encargada del caso y la convertirá en un miembro del equipo de investigación.
Parece probado que durante el desarrollo de catástrofes naturales, un asesino en serie aprovecha el desconcierto y la desolación para cometer asesinatos de familias enteras. Con la previsión de datos meteoroloógicos en la mano y viendo el incremento de fenómenos atmosféricos adversos implica un aumento de actividad del asesino, todo apunta a que su próximo destino será Nueva Orleans.
Se inicia de este modo una frenética carrera contra reloj para su detención mientras en plena investigación se verán sorprendidos por la devastadora fuerza de destrucción del huracán que provocó una de las mayores catástrofes de la historia reciente.
A diferencia de sus trabajos anteriores, apreciamos en la narración mayor rigor ,buena documentación y pulido en aquellos aspectos donde antes perdía fuelle como era la investigación policial.
Al mismo tiempo, se amplían detalles de la vida personal de la protagonista que cobran aquí un protagonismo fundamental para forjar y fortalecer al personaje, algo que no terminaba de conseguir en sus anteriores libros pero que al mismo tiempo chocará al lector que verá una madurez inusitada en la joven Amaia de la que carece o al menos es mi sensación, en las historias que se desarrollaron temporalmente en etapas adultas. Algo que pone de manifiesto el crecimiento de la autora en su capacidad narrativa pero que resta puntos a su protagonista en los otros libros.
Tampoco falta ese componente mágico, tan característico de la autora, incluyendo paisaje y localizaciones como un protagonista más de la historia. Tratándose de Lousiana, el abaníco folklórico es tan extenso como magnético, plagado de supersticiones y donde la naturaleza juega un papel fundamental.
La historia atrapa, nos hechiza y asistimos al desolador drama que asola a una población devastada por la fuerza de los elementos,arrasada de forma implacable mientras la ayuda gubernamental parece no llegar nunca. Una clara reivindicación del poco interés que suscitan aún en la actualidad la población de etnia negra, abandonada a su suerte en un claro ejercicio de xenofobia encubierta donde las muestras de apoyo llegan sólo a las clases privilegiadas y elitista en ese estado olvidado de la mano de Dios.
Para hacernos partícipes de esta injusticia, Redondo concibe aun personaje con el que difícilmente no podemos sentir más empatía: Nana. Desgarradora su historia.
Y la elaboración de los crímenes, la mentalidad del asesino así como su modo de actuación despiadado, bebe del más puro estilo "gellidista". Vamos que se nota que la amistad Redondo-Géllida ha sabido exprimir lo mejor para aportarlo a esta historia que se nos hace corta y plagada debuenos personajes .
Calificación: Notable alto.
Para leer de principio a fin sin pausa.
Lo mejor: La gran evolución narrativa de la autora que nos reconcilia con una protagonista que no terminábamos de querer por completo; su valiente crítica a la inacción americana para con los más desfavorecidos que ponen el foco en la aún hoy existente xenofobia de la América más profunda; su extraordinaria documentación presente en todas y cada una de sus páginas; que siga abogando por completar el trabajo científico con el intuitivo aunque sea valiéndose de dar credibilidad a lo inexplicable que no por ser increíble, es menos cierto; el personaje de Nana.
Lo peor: Que te quedas con ganas de más.
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